Portada> Noticias > Accepted Acumulación de tarjetas microSD sobre superficie. Foto: Unslash. Carlos Abásolo
Publicado el 15 de octubre, 2025 • 21:39
Las tarjetas microSD son uno de los dispositivos de almacenamiento más sencillos u fáciles de usar, además de baratos, en este momento. Gracias a su tamaño diminuto y a su gran compatibilidad, se ha convertido en una memoria imprescindible para mundos como la fotografía o incluso los smartphones. Pero apostar por una microSD para cuestiones más exigentes pueden acabar siendo una verdadera pesadilla para los usuarios.
Una tarjeta microSD está diseñada para el almacenamiento de datos de manera temporal y su fácil acceso entre varios dispositivos. Pero para operaciones que requieren de mayor capacidad y velocidad, no es el dispositivo más adecuado. Por ejemplo, aunque pueda parecer extraño, hay quienes han intentado probarla como disco main para un sistema operativo… con sus correspondientes consecuencias.
Además, contribuye a un deterioro prematuro de la propia tarjeta y a problemas de rendimiento. Por lo que, por mucho que sus campañas de publicidad y marketing prometan una fiabilidad absoluta, debemos saber cuáles son sus limitaciones. Por lo que, si quieres aprovechar al máximo tu microSD sin problema alguno, vamos a repasar 3 errores más habituales de lo que crees para que no tengas problema alguno.
tarjeta microSD insertándose en cámara. Foto: Unsplash.
Usar una microSD como almacenamiento de copias de seguridad
Aunque su precio y la capacidad de centenares de gigas nos permita hacer una copia rápida, guardar archivos tan importantes como una copia de seguridad no es la mejor idea de todas. Estas tarjetas son muy vulnerables a los fallos electrónicos y degradación por «bit rot» y daños físicos. No podemos compararla con un SSD o un disco duro externo y su fiabilidad.
Una microSD puede perder información tan importante como esa sin avisar. Y el riesgo es mayor aún si dejamos de utilizarla durante varios meses o incluso años. Por eso, aunque puedas almacenar fotos, documentos o proyectos, nunca lo hagas a largo plazo solo en una microSD. Como método secundario, cumple su función, pero es mejor apostar por dispositivos más fiables.
Utilizar la microSD como disco main para el sistema operativo
Puede parecer un verdadero desafío, pero instalar Home windows, Linux o cualquier sistema operativo en una microSD es una práctica que se lleva a cabo para mini PCs o Raspberry Pi. Aun así, es una decisión muy arriesgada basándonos en la estabilidad y el rendimiento. De hecho, estos dispositivos no están preparados para ciclos intensivos de lectura y escritura que necesita un sistema operativo: actualizaciones, descargas, gestión de registros, archivos temporales…
Por lo que es común que sufra ralentizaciones extremas, errores de acceso, y en el peor de los casos, el sistema deje de funcionar sin previo aviso. Por lo que el equipo queda inutilizable y, con él, nuestros datos.
Almacenar y ejecutar juegos AAA en una microSD
Muchos usuarios encuentran en la microSD la solución «perfecta» para ahorrar datos en el disco main de su PC instalando y ejecutando juegos en ellas. Un error que multiplica exponencialmente los riesgos en juegos de gran tamaño y requisitos. Todavía están lejos de igualar a un SSD o incluso disco HDD en tiempos de carga y estabilidad. De hecho, lo long-established es que aparezcan bloqueos, tiempos de carga extremadamente largo y «lumber» constante.
Las microSD están pensadas para un soporte y transferencia de archivos ligeros. No paa soportar los requerimientos de juegos triple A como Cyberpunk 2077 o Crimson Ineffective Redemption 2. Si eres gamer y quieres dejar las frustraciones a un lado, alejarte de esta solución es lo mejor en estos casos.
