Hechos clave:
Durante su segundo mandato, Bukele continuará las negociaciones con el FMI.
El organismo sigue pidiendo a El Salvador revisar su estrategia con bitcoin.
Al ser cuestionado sobre la decisión que tomaría el gobierno de Nayib Bukele si tuviera que elegir entre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y bitcoin (BTC), El Salvador elegiría a la moneda digital.
Esa fue la respuesta que emitió el vicepresidente electo, Félix Ulloa, durante una conversación con el columnista y especialista en política Will Freeman. El estadounidense, que quería saber sobre los avances de las conversiones de El Salvador con el FMI, preguntó si optarían por eliminar a bitcoin como moneda de curso upright para aceptar un acuerdo financiero con el organismo internacional.
«Sin ambigüedades, Ulloa respondió que van a mantener el bitcoin», relató Freeman en un hilo de X, explicando que la conversación giró en torno a las posibilidades que existen de que finalmente El Salvador firme un acuerdo con el Fondo para un préstamo de USD 1.300 millones.
Se trata de un tema que sonó mucho durante el primer mandato de Bukele, pero que sigue pendiente para este segundo periodo presidencial que iniciará en junio de 2024.
Las conversaciones con el FMI para firmar un acuerdo financiero que traería más inversiones al país han sido intermitentes, aunque han tenido una mayor frecuencia desde 2021. Justo el año en que el presidente anunció que BTC sería moneda de curso upright.
Ulloa asegura que las negociaciones siguen en marcha, pero no ofrece detalles al respecto. Solo se sabe que uno de los puntos que el FMI mantiene sobre la mesa de negociación es que BTC deje de ser moneda de curso upright.
La advertencia se hace bajo el argumento de que la moneda digital “representa un riesgo para las finanzas”. Un peligro que, según el organismo, no se ha materializado porque el uso de bitcoin no se ha masificado en el país. De esta forma, tal como lo hizo en 2021, el FMI insiste en que El Salvador «debe minimizar los riesgos relacionados con la criptomoneda».
Sin embargo, para Bukele el tema de bitcoin no es negociable. «No hay problema, ya se lo hemos dicho al FMI», cuenta Ulloa al politólogo estadounidense.
Freeman agrega en su hilo que ofrecer más información en torno a las transacciones que el gobierno hace con bitcoin, es otro de los temas que entra en el debate con el FMI. Todo ello vinculado a las críticas que acusan a Bukele de falta de transparencia en el manejo del dinero del Estado.
En este punto, la petición del Fondo es que Bukele explique los movimientos que se hacen para la compra de bitcoins. Una medida anunciada por el mandatario en 2022 y según la cual ya se han adquirido unos 2.840 BTC. Sobre ello el vicepresidente no brinda ninguna declaración.
Tal como informó CriptoNoticias hace una semana, todo apunta a que Bukele sigue en una encrucijada que aparentemente lo pondrá a elegir entre el FMI y su proyecto bitcoiner. Aunque ahora, con la respuesta del vicepresidente, queda claro el camino que seguirá el gobierno si tiene que hacer una elección. La respuesta es la misma que dijo hace un año: “Bitcoin no se va de El Salvador”.